Los drones se han convertido en nuevas armas para los hackers, quienes los utilizan para una variedad de ataques. Estos cibercriminales ponen su atención en los drones con el objetivo de:
- Robar datos: Los drones se emplean para robar información personal y financiera de personas, así como para acceder a datos confidenciales de empresas e instituciones.
- Vigilar y espiar: Los hackers utilizan drones para vigilar y espiar a personas o lugares, lo que puede tener implicaciones de privacidad y seguridad.
- Actividades ilegales: Además, los drones se utilizan para otras actividades ilegales, como la interrupción de señales de radiofrecuencia o el suplanta miento de señales GPS.
Estos dispositivos aéreos han ganado fama por su capacidad para grabar vídeos y tomar fotografías aéreas, pero también presentan vulnerabilidades. Los cibercriminales conocen estas debilidades y publican en Internet las brechas de seguridad de los drones. Además, los foros y comunidades en línea proporcionan plataformas para intercambiar técnicas y herramientas de hacking específicas para drones, ampliando el alcance y la sofisticación de los ataques cibernéticos dirigidos a estos dispositivos. Algunos métodos utilizados para hackear drones incluyen:
- Cyber Take-Over (Toma de control cibernético): Mediante esta tecnología de hackeo, los piratas informáticos interceptan la señal de comunicación entre el dron y el operador, tomando el control total del dispositivo y sus sistemas.
- Inhibición de señal de radiofrecuencia: Los hackers pueden perturbar la comunicación entre el dron y la unidad de control, causando la pérdida de señales de vídeo, telemetría o incluso GPS.
- Suplantación de señal GPS: Utilizando software, los cibercriminales envían al dron coordenadas falsas, afectando su navegación.
En 2024, Kaspersky Lab prevé un aumento en el uso de drones para hackeos, señalando una preocupante tendencia. Los expertos advierten sobre la combinación de intrusiones físicas y cibernéticas mediante drones equipados con herramientas para recopilar contraseñas WiFi o lanzar llaves USB maliciosas. Este nuevo enfoque representa una seria amenaza en el mundo cibernético, exigiendo una preparación adecuada ante estos desafíos emergentes en seguridad cibernética.
En resumen, los drones no solo son herramientas para la exploración y el entretenimiento, sino también objetivos para los ataques cibernéticos. La seguridad y la protección de estos dispositivos deben ser una prioridad para prevenir posibles riesgos.